Uno de cada trece niños que nacen en
España son prematuros, lo que supone
31.000 bebés nacidos antes de tiempo cada año. Además, el número ha ido en aumento --del 4 al 7% desde 1996 a 2006-- debido fundamentalmente al
retraso de la maternidad y la reproducción asistida. Sin embargo,
su supervivencia sin secuelas es cada vez mayor y la atención al gran prematuro es cada vez menos agresiva.
Este
sábado se celebra el Día Internacional de la Prematuridad con el
objetivo de concienciar sobre el problema de salud pública que supone el
incremento de nacimientos prematuros, la importancia de los cuidados
neonatales y las medidas para evitar que cualquier tipo de virus pueda
debilitar su salud.
Estos bebés son muy vulnerables, por lo que
necesitan contar con la ayuda y el apoyo de sus padres, familiares,
especialistas y enfermeras, además del soporte del sistema sanitario.
En este sentido, el doctor Enrique Criado, médico adjunto al servicio neonatal del Clínico San Carlos de Madrid, donde la
Asociación de Padres de Niños Prematuros
(APREM) organiza una actividades de concienciación, valora
positivamente la ayuda que reciben de grupos de padres de hijos
prematuros para estar
cerca tanto de los progenitores como de
sus hijos en una etapa complicada e imprevista para todas las partes
como es un parto prematuro.
"Estas asociaciones nos
ayudan en todo. Poco a poco van cogiendo su papel en la vida de los
grandes prematuros y de la sociedad y a nosotros nos sirven como
colaboradores --ha señalado a Europa Press--. Un gran prematuro es muy
especial, cualquier ayuda que tengamos es una gran alegría y una gran
ventaja".
Así, destaca especialmente la importancia de este tipo de asociaciones porque
ayudan a los padres a "comprender la situación".
"Nosotros les hacemos comprender todos los problemas que pueden surgir
con su hijo, pero seguimos siendo los médicos. Es más fácil hablar con
alguien que ha vivido la misma experiencia y esas personas nos ayudan
mucho", ha apuntado Criado.
"Cuando tienes un parto prematuro es una cosa que ningún padre comprende en el momento,
es una situación muy tensa.
Un embarazo, que es un motivo de alegría para una pareja, de pronto se
convierte en una fuente importantísima de preocupaciones", ha señalado
el doctor del Clínico San Carlos.
"LA ATENCIÓN AL GRAN PREMATURO EN ESPAÑA ES MUY ALTA"
"La
atención al gran prematuro en España está a un nivel muy alto, se ha
desarrollado muchísimo y da lugar a que seamos un país con una baja tasa
de mortalidad perinatal y neonatal", ha explicado Criado.
Pese a que en España uno de cada trece niños nacen de un modo prematuro,
los prematuros extremos --nacidos por debajo de las 30 semanas-- "van teniendo mas supervivencia sin secuelas", según ha confirmado el doctor Criado.
También ha apuntado que
en los últimos 20 años, el uso de tratamientos con grandes prematuros tiende a ser cada vez menos agresivo.
"Intentamos utilizar menos medidas como la ventilación mecánica para
disminuir al mínimo el riesgo de infecciones en estos niños", ha
explicado.
El mayor porcentaje de los nacimientos prematuros se refiere a los n
acimientos entre las semanas 32 y 37.
En este grupo, que supone el 5,5 por ciento, los recién nacidos están
en riesgo no vital, pero con problemas de salud. Los niños que nacen por
debajo de estas semanas tienen posibilidades más bajas de
supervivencia, y las secuelas en los que lo consiguen son altas.